Aunque muchas personas no lo tengan en cuenta, como bien dice la famosa frase: «Somos lo que comemos». Y esta frase tan simple a su vez dice mucho, ya que es importante saber que nuestra salud dependerá en buena medida de la alimentación que se ingiera cada día. Por ello siempre se nos han enseñado desde niños que la salud de nuestro cuerpo esta intensamente ligada a la alimentación que tomamos diariamente, aunque a muchos se nos haya olvidado.
En ocasiones la sociedad no es consciente de los inconvenientes para la salud que puede acarrear no comer sano de forman habitual, puesto que ya no sólo es cuestión de engordar, también se pueden sufrir otros problemas de salud de gran importancia al no cuidar nuestra dieta, como el aumento de colesterol en nuestro organismo.
Es importante saber que en menor o mayor grado todos los seres humanos tenemos colesterol en nuestro organismo, pero en el caso de las personas que no se cuidan correctamente y hacen barbaridades con la comida, puede verse incrementado de manera alarmante, una sustancia que puede ser tremendamente dañina para el cuerpo. El colesterol provoca que los lípidos se acumulen en las arterias dificultando el paso de la sangre de forma fluida, algo que puede agravarse de forma considerable.
Tampoco se puede pasar por alto que una alimentación inadecuada puede ocasionar osteoporosis, haciendo que nuestros huesos pierdan masa ósea, lo cual a la larga puede provocar fracturas o roturas de huesos con mayor facilidad que en cualquier otra persona. En la actualidad el estrés se ha convertido en parte de nuestra vida, por desgracia en un pedazo más de nosotros. Y para combatir de forma eficaz el estrés debemos saber que la nutrición es una parte totalmente fundamental, un método óptimo para lograr que el estrés acumulado en una persona se elimine. Sigamos una dieta saludable desde niños y evitemos todos estos problemas y muchos otros.